miércoles, 24 de octubre de 2007

una cucaracha en el oido

Callate!

A estribor, hacia la tormenta.

(no se puede, se romperian los tejidos)

Hoy son mis foliculos inflamados
mi lengua ensangrentada
la espalda encorvada.


¡Callate!

¡No quiero escucharte más!

Taquicardia nocturna,
masturbación compulsiva
ebrio
acalambrado
con el pene ensangrentado.
Frente a las hormigas en el televisor.


Callate!

Comeré de mi semen para sentirme mujer.
Ser penetrado
y fantasear con juegos sexuales
en los subterraneos donde lloro
en mi vomito
mientras risas y humillaciones
inundan los espacios en jadeos

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Uff...ni en mis fantasías más perversas podría haber hilado estas oraciones...
No sé q rol atribuirle a la cucaracha...estaba inictándote a parar?..te excitaba más su castración?
Jess

fugaz dijo...

Todo un Kafka,
cual perversa motamorfosis.

Anónimo dijo...

Realmente es muy crudo tu diálogo Pancho...podría pensar que serías un muy buen comediante,pero eres un poeta...en la comedia demostrarías histéricamente cuán grotesca puede ser tu persona proyectando toda una humanidad. Si hay veces en las que deseamos con mucha morbo aparecer acostados al lado de todo eso que relatas...

Un abrazo amigo mio y siga con sus impulsos,liberemosnos de las ataduras de la racionalización!!!!!!!!!!!!!1

Muacs!

Negris dijo...

y si volvemos al onanismo, poliformicamente deseantes y excitados. Dejando que los fluidos remplacen nuestros zapatos,para poder deleitarnos en la fragmentaciòn de nuestra estupida rigidez conciente y satisfacer nuestros deseos parcializados...

Saludos joven perversillo

Espero verle ´prontito

Nos vemos en Reich